En un entorno privilegiado se encuentra esta finca que goza de la proximidad del monte y del mar al mismo tiempo, con acceso por carretera asfaltada hasta el final. En la planta a nivel de calle, la casa está compuesta por un amplio salón recibidor con cocina americana, una terraza interior cubierta, otro salón con balcón, 2 dormitorios muy espaciosos y 2 terrazas exteriores de 40 y 50 m cuadrados respectivamente. Además, el garaje cubierto y cerrado para 2 coches tiene acceso directo al inmueble. La finca, distribuida en 5 superficies planas escalonadas de aproximadamente 1000m cuadrados cada una está actualmente plantada con varias especies de frutales tropicales y exóticos pero la mitad de la superficie es suelo urbano o asentamiento rural lo que supone una gran oportunidad de inversión para construir de manera analógica o ecológica colocando viviendas prefabricadas autosuficientes.